La venta con renta implica que el vendedor permanece en la propiedad y paga una renta mensual al nuevo propietario, mientras que en la nuda propiedad el vendedor retiene el derecho de uso y disfrute de la propiedad sin realizar pagos mensuales. La venta con renta puede ser más beneficiosa debido a su flujo de efectivo predecible y la transferencia de responsabilidades. Además, destaca que en la venta con renta el vendedor vende la propiedad a precio de mercado, lo que asegura un valor justo por el activo.